Aunque para muchas personas la duración ideal de una película es de hora y media o máximo dos horas, hay quienes encuentran en las cintas de más de tres horas una obra maestra o la elección perfecta para arrullarse hasta quedarse dormidos. El señor de los anillos es una de las trilogías que más es señalada por sus cuatro horas (incluyendo escenas eliminadas), pero hay otros autores como Martin Scorsese que se vuelven famosos por sus proyectos que casi alcanzan o superan los 180 minutos.
Cuando se trata de películas de ciencia ficción, la saga Avatar de James Cameron es la que más resalta, pero tampoco se pueden quedar atrás títulos de superhéroes como Avengers: Endgame o La liga de la justicia de Zack Snyder. Sin embargo, si se habla de cintas consideradas como largometrajes imperdibles, entonces es imposible no voltear a ver a la obra sci-fi de Wim Wenders que estrenó a inicios de los 90.
Warner Bros.
En 1991 llegó a cines esta historia que mezcla ciencia ficción y romance en la que William Hurt y Solveig Dommartin interpretan a dos personas que son perseguidos por todo el mundo mientras coexisten en una realidad en la que hay un dispositivo que es capaz de documentar experiencias visuales y reproducir los sueños. Coescrita por Wenders y Peter Carey, esta cinta destacó por su mezcla de géneros, además de adentrarse en el campo de las road movies.
Hasta el fin del mundo estrenó con diversas ediciones y proyectó cortes de distinta duración. En Estados Unidos, su duración era de 158 minutos, pero en Europa su metraje era de 179 minutos (¡casi tres horas!); sin embargo, el también autor de París, Texas lanzó su propia versión del director y su edición estuvo a punto de llegar a las cinco horas.
Warner Bros.
El largometraje de Wenders, el corte de director, registra 287 minutos, así que no es una opción fácil para un espectador promedio. Tal vez solo los que se autodenominan cinéfilos se aventarían el desafío de disfrutar de esta película, pero la crítica de Rotten Tomatoes la calificó con un puntaje de 89 por ciento de aprobación. Lamentablemente, este filme coprotagonizado por Sam Neill y Max von Sydow no se encuentra disponible en plataformas de streaming.