El cine y la historia han sido mejores amigos desde tiempos inmemorables. Y es que no hay nada como ver en pantalla esas épocas que solo conocíamos por libros de texto, y que ahora vienen acompañadas de violines dramáticos, explosiones épicas y vestuarios dignas de un Premio Oscar. Desde el horror de la Segunda Guerra Mundial en La lista de Schindler hasta la desgarradora belleza de El pianista, pasando por retratos poderosos como el de Winston Churchill en Las horas más oscuras, las películas históricas tienen una magia que transforma el pasado en emoción pura.
Justo cuando pensábamos que ya lo habíamos visto todo, llega una película que se atreve a hacer lo impensable: contar más de siete siglos de historia en una sola cinta. Imagina una película que arranca en la Edad Media, atraviesa conflictos políticos, insurrecciones, leyendas heroicas y aún tiene tiempo de hablar de libertad, resistencia y orgullo nacional. Pues eso es lo que propone esta nueva producción.
Hablamos de Guillermo Tell, una superproducción de acción histórica dirigida y escrita por Nick Hamm que llega con la intención de devolverle el protagonismo a uno de los héroes más emblemáticos del folclore suizo. Basada en la clásica obra de Friedrich Schiller, esta nueva adaptación quiere ser mucho más que una lección de historia: quiere ser un viaje cinematográfico al corazón de la libertad.
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La historia sigue a Guillermo Tell, el legendario arquero obligado a disparar una flecha a una manzana colocada en la cabeza de su hijo. ¿El motivo? Una rebelión latente contra el dominio opresivo de los Habsburgo. El relato, lleno de simbolismo, ha sido utilizado durante siglos como inspiración para movimientos sociales, piezas teatrales, óperas y ahora como material para una película que promete poner los pelos de punta.
Nick Hamm, conocido por su trabajo en The Journey y otras cintas con carga política e histórica, se pone al mando de esta versión de Guillermo Tell con un enfoque renovado. No sólo es una reactivación de una anécdota del siglo XIV, sino de hacer un recorrido por setecientos años de consecuencias históricas.
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Guillermo Tell es una locura histórica que quiere llevarnos de la mano a través de los siglos como si fuera un tour guiado con efectos especiales incluidos. Y lo mejor de todo: no se trata de una serie de 15 temporadas ni de un documental de tres horas con voz en off, sino de una película de aventuras como las de antes, de esas con batallas, paisajes épicos, traiciones y su dosis de violencia.
