¿Te imaginas un día pedir un taxi de aplicación y que tu conductora sea una actriz como IU de Si la vida te da mandarinas, Han So-hee de Mi nombre o hasta Kim Tae-ri de Veinticinco, veintiuno?
Pues resulta que ahora ese sueño de conocer de esta forma a una querida actriz podría ser real para los fans de Jeong Ga-eun quien a sus 47 años emigró de la televisión a este nuevo empleo. Lo interesante y que genera muchas reflexiones al respecto es que le costó mucho conseguir este trabajo y fue rechazada en repetidas ocasiones por su sexo.
Apenas este lunes, la actriz que apareció en series como Master's Sun, A Thousand Kisses, Infinite Girls y más recientemente en la cinta Tales of nobody compartió a través de su canal de Yotube un video celebrando que finalmente aprobó una entrevista para convertirse en conductora de taxi.
En el video Jeong también aclara que antes de este gran paso estuvo llamando a varias compañías para preguntar por vacantes como conductora de medio tiempo pero fue rechazada en repetidas ocasiones . ¿El motivo? La mayoría de las empresas citaron políticas de hace años que impiden contratar a mujeres para este puesto en Corea del Sur o bien porque no aceptaban trabajadores de medio tiempo.
Youtube
Eso hasta ahora porque con esta consideración la actriz coreana hace historia en una empresa que cambió las reglas del juego. "Jeong es la primera empleada mujer en nuestra compañía en 65 años", menciona un empleado de la empresa en el video de YouTube según recupera el medio Korea JoongAng Daily.
La actriz, que comenzó su carrera como modelo en 1997 y ganó popularidad en Rollercoaster protagonizando junto a Jeong Hyeong-don, comentó en el video que debido a que su padre solía conducir un taxi ella escuchó todo tipo de historias y considera que "tiene un talento natural para el servicio al cliente".
Instagram
La decisión de Jeong por comenzar a trabajar como conductora de taxi es una alternativa que ha buscado para superar dificultades económicas que enfrenta tras un divorcio y una estafa cometida por su antiguo esposo. Este empleo de medio tiempo resulta la nueva vía de Jeong para mantenerse a sí misma y a su hija, producto de su antiguo matrimonio.
Con este hecho, la actriz coreana marca un paso importante en la independencia económica de las mujeres en el país asiático que, por deseo o necesidad, opten por un empleo de este tipo y permitiendo que su oferta laboral se limite un puesto menos a la vez.