Desde su debut en el cine, los X-Men se convirtieron en una de las franquicias más queridas del universo de los superhéroes. Basada en los cómics creados por Stan Lee y Jack Kirby para Marvel Comics en los años 60, la saga nos ha mostrado a un grupo de mutantes marginados que luchan por sobrevivir y ser aceptados en un mundo que los teme. Pero entre todos ellos, uno de los personajes más populares e icónicos es sin duda Wolverine, quien es el mutante con garras de adamantium, instinto animal y un pasado sumamente trágico.
En el cine, Hugh Jackman fue sinónimo de Wolverine desde que lo interpretó por primera vez en X-Men, y gracias a su carisma, físico y la intensidad con la que abordó al personaje lo se convirtió en una leyenda del cine de superhéroes. Además, Jackman encarnó al mutante en un total de nueve películas, incluyendo la aclamada Logan, que parecía marcar su despedida hasta su regreso en Deadpool & Wolverine.
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Sin embargo, pocos recuerdan que hubo un único momento en que Wolverine fue interpretado por otro actor. Ocurrió en X-Men Orígenes: Wolverine, cuando la película nos lleva hasta Canadá en 1845, presentando los orígenes del personaje. Allí conocemos a un joven James Howlett, un niño enfermo y sensible que presencia el asesinato de su padre biológico a manos del cuidador Thomas Logan. En un momento de furia y desesperación, el pequeño revela por primera vez su mutación: unas garras óseas emergen de sus manos, cambiando su destino para siempre.
Ese niño fue interpretado por Troye Sivan, actor y cantante sudafricano que, aunque solo aparece brevemente, recibió elogios por su actuación como un mutante. Y aunado a ello, el joven actor logró transmitir en pocos minutos la vulnerabilidad y la furia interna del personaje, sembrando las raíces del Wolverine que todos conocemos.
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Tras esta experiencia en cine, Troye consiguió algunos otros papeles, pero eventualmente optó por dedicarse por completo a su carrera como cantante, donde ha alcanzado reconocimiento internacional con álbumes como Blue Neighbourhood y Bloom. Así, aunque Hugh Jackman seguirá siendo el rostro principal de Wolverine en el cine, Troye Sivan ocupa un lugar especial en la historia del personaje como el único otro actor en darle vida en live-action, aunque fuera en su etapa más joven, vulnerable y dolorosamente humana. Esta cinta está disponible en Disney+.