Hace varios años Cincuenta sombras de Grey, la trilogía de películas, estuvo en el centro de la opinión pública acusada de romantizar ciertas conductas tóxicas de una relación y representar de forma poco atinada las prácticas del BDSM. Pues resulta que en 2020 en Polonia surgió una saga de películas que tomaron varios de sus principios e hicieron una propia versión, adaptando otra trilogía de libros eróticos.
Todo comenzó con 365 días, la primera película que llevó a la pantalla la novela homónima de Blanka Lipińska y que no sólo se convirtió en uno de los fenómenos más controversiales de Netflix, sino que pese a las críticas y señalamientos negativos se mantuvo entre lo más visto del catálogo.
La trilogía de '365 días'
La primera película de romance erótico fue dirigida por Barbara Bialowas y Tomasz Mandes. Sigue Laura Biel, interpretada por Anna-Maria Sieklucka, una directora de ventas exitosa que en cambio no ha podido conseguir ese éxito en su vida amorosa. Así, en un viaje a Italia para celebrar su cumpleaños se encuentra con su peor destino -o el mejor según la narrativa.
Massimo Torricelli, a quien Michele Morrone da vida, se siente instantáneamente atraído por Laura y al ser un poderoso jefe de la mafia no le es complicado secuestrarla en su lujosa casa para darle una alternativa: tiene todo un año para pasar con él y enamorarse.
Netflix
365 días subió la temperatura de la plataforma de suscripción con la buena cantidad de secuencias de pasión entre Laura y Massimo que de alguna forma recuerdan a esa dinámica de dominación y sumisión de Cincuenta sombras de Grey.
Después de su estreno en 2020 el éxito de la cinta, que estuvo durante varios días en el Top 10 de las películas más vistas de Netflix, dio lugar a sus dos secuelas. Le siguieron 365 días: Aquel día y 365 días más ambas estrenadas en 2022.
Netflix
La polémica que llovió sobre la trilogía
En éxito de las películas en streaming no evitó que su narrativa, cargada de conductas agresivas, fuese criticada a nivel internacional. En redes sociales y medios digitales le llovieron críticas de expertos en salud mental y varias denuncias públicas sobre la romantización del abuso.
Un reportaje de Reuters señala que incluso hubo llamados para retirar la película por su contenido como el secuestro, la coerción y explotación. "Hay preocupaciones por cómo glamouriza el secuestro y la trata", recopiló el medio en su momento.
En cualquier caso, ya sea por curiosidad, el calor de la polémica o la idea un "romance peligroso", las tres películas llegaron a estar en la lista de lo más visto de Netflix y la autora de la historia original defendió el material como fantasía erótica. ¿Viste o piensas ver alguna vez la trilogía?