Disfrutar el cine en pantalla grande es una experiencia que, sin importar que vayas a ver Bugonia, Zootopia 2, Avatar: Fuego y ceniza o cualquier otro estreno en cartelera; comparte suficientes características en común que se percibe como algo universal. Una gran pantalla al frente, sonido envolvente y butacas en su particular color rojo.
Si bien en la actualidad el color que cubre los asientos de las salas de cine ha variado bastante, llegando al azul o negro, si alguien te pide que imagines o dibujes una sala de proyección es común que pienses en el color rojo para las butacas. ¿Cuál es la razón para que la mayoría tengamos esta idea en la mente casi como un efecto Mandela?
El color rojo: un lujo y tradición
Mucho antes de que pudiésemos ver Wicked: Por siempre, Una batalla tras otra y otras películas (como las recién nominadas a los Golden Globes), en pantalla grande la ópera era el entretenimiento con mayor esplendor. Con esto en mente, durante su apogeo en el siglo XIX los teatros se revestían de colores que hicieran alusión a la riqueza destacando el dorado y el rojo.
Este último color en particular, utilizado en los asientos de los grandes recintos, se asociaba también al poder y prestigio pues quienes asistían a la ópera normalmente pertenecían a clases altas. Con el tiempo, y con la llegada del cine como nuevo entretenimiento, aquel rasgo se quedó instaurado como una especie de tradición.
Cinemex
Incluso, muchos teatros que solían ser el hogar de distintas puestas en escena se convirtieron directamente en salas de proyección, como sucedió en su momento con Cine Ópera en la colonia San Rafael de la CDMX, conservando los asientos rojos que ya estaban instalados.
Un efecto visual útil para la experiencia cinematográfica
Por otro lado, el color rojo en los asientos tiene un rasgo práctico que se adapta perfectamente a la experiencia de ver una película en una gran sala oscura.
Universidad de Valencia
Resulta que el color rojo es de los primeros que desaparece de la visión humana cuando las luces se apagan. Esto se conoce como el Efecto Purkinje, que indica que colores como el verde y el azul se perciben un poco más en la oscuridad.
Y es que imagina que estás viendo Los ilusionistas 3 o Jujutsu Kaisen: Ejecución y no puedes evitar ver una fila de asientos brillando en frente a ti. Así que ahora lo sabes, la elección de un buen color que pase desapercibido en la sala; ya sea el tradicional rojo, azul o negro; es esencial para mantener la experiencia inmersiva, ¿cuál es tu preferido?