Hay algo mágico en las historias de amor ambientadas en verano. Desde Llámame por tu nombre hasta A todos los chicos de los que me enamoré, pasando por Mi primer beso, o incluso clásicos como Baile caliente, los relatos románticos de esta época del año siempre son garantía porque nos transportan de inmediato a un ambiente relajado y único, entre piel salada, ropa ligera, besos espontáneos y personajes que descubren quiénes son cuando el sol brilla más fuerte.
Y ahora, dentro del catálogo de Netflix, hay una película perfecta para quienes quieren desconectar un rato, suspirar un poquito y dejarse llevar por paisajes costeros que parecen sacados de un anuncio de vacaciones. Esta producción combina justo lo que uno espera de un romance juvenil: un lugar hermoso, una pareja que intenta reencontrarse, momentos íntimos y un conflicto emocional tan real como sencillo.
Amor, mar y el tipo de drama que solo trae el verano
La película es A través del mar, es la secuela directa de A través de mi ventana, el fenómeno juvenil basado en la novela de Ariana Godoy. La primera entrega fue un éxito entre los fans del romance adolescente, y esta continuación retoma la historia justo donde las emociones quedaron en pausa.
Netflix
Aquí, los protagonistas, Raquel y Ares, se reencuentran después de pasar casi un año separados. Ya no son los mismos adolescentes de la primera película. El tiempo ha dejado dudas, miedos e inseguridades que todavía no saben cómo gestionar. Y por eso el escenario elegido es perfecto: unos días en la playa, lejos de la presión diaria y cerca del sonido del mar, donde todo parece más fácil, hasta que deja de serlo.
Un momento para reconectar y descubrir lo que duele
Lo fascinante de A través del mar es que no se limita a mostrar un romance idealizado. Raquel y Ares llegan al verano con entusiasmo, pero también con heridas que no se han tocado. Quieren estar juntos, pero no saben muy bien cómo hacerlo sin tropezar con viejos problemas.
Netflix
El amor adolescente suele ser así: intenso, frágil y lleno de expectativas. Y la película lo retrata con una sinceridad que conecta rápido con el público joven. Raquel duda de sí misma, de lo que siente, de si realmente encaja en la vida de Ares. Él, por su parte, intenta mantener la calma mientras lidia con el impacto emocional de su familia, su futuro y su propio rol.
¿Será el amor lo suficientemente fuerte? Esa es la pregunta que atraviesa toda la película. A través del mar no pretende dar un mensaje definitivo ni una solución mágica. Su encanto está en acompañar a Raquel y Ares en un momento de vida donde nada está resuelto, donde amar da miedo, pero alejarse también duele.
