Este año el actor-director redimido hizo una humilde pero importante aparición en Guerra de Papás 2, con la que demostró que su sola presencia es suficiente para convertir un churro en una película decente. En 2018 protagonizará The Professor and the Madman y Dragged Across Concrete. Así que sí, parece que ya lo perdonamos, que Hollywood tiene mala memoria a corto plazo y que entonces sólo es cosa de esperar unos cinco años para que volvamos a ver a Kevin Spacey.