No por nada esta película fue una de las favoritas en el Festival de Venecia 2018. La música y las tomas de Van Gogh en la puerta de la eternidad son una experiencia inmersiva. La cámara puede colocarse en primer plano, desenfocar e incluso tornarse en blanco y negro para ver todo desde los ojos de Van Gogh, quien ya era incomprendido por sus padecimientos mentales. La música nos dicta cuáles son los momentos de inspiración abruptamente interrumpidos por la cotidianidad y por aquellos que viven sin arte.
Hoy se estrena la película que le valió al actor su nominación al Oscar como Mejor actor.