Hace seis años Orange is the New Black fue uno de los primeros contenidos originales de Netflix y que atrajo a suscriptores a la muy inexperta plataforma en ese entonces. El servicio de streaming se estaba haciendo de un nombre con varias producciones hechas para ellos, pero aún no eran suficientes. Lo cierto es que se trataba de la novedad y la empresa destacó por generar contenidos novedosos, oportunos y particularmente adictivos.
Sus campañas de publicidad eran agresivas y encantadoras; podían ver en la calle activaciones de sus series e inevitablemente la gente empezó a enamorarse del streaming. Orange is the New Black llamó la atención por ser acida, audaz, hilarante; criticaba al sistema penitenciario de Estados Unidos y empoderaba a la mujer con diversos personajes femeninos, agresivos, entrañables y particularmente multiculturales.
¿QUÉ PODREMOS VER?
Ahora, después de algunas temporadas -unas más flojas que otras- llega la final, cerrando el arco de las protagonistas y alejándolas de todo lo que conocían. Sin duda ha sido todo un viaje, pero ¿qué nos espera para el final de las prisioneras de Litchfield? 13 episodios sumamente emocionales que harán sentir al espectador la nostalgia de la misma manera que cada uno de los personajes.
Basada en el libro de Piper Kerman, la historia se ha ido por muchos caminos, unos más sólidos que otros, pero ha sabido mantener la esencia femenina que la caracteriza. En la temporada pasada recordemos cómo se evidenciaron los hoyos que tienen las políticas del sistema de deportación y las condiciones deplorables con las que traten a los inmigrantes.
Por otro lado, Piper (Taylor Schilling) por fin fue liberada y empezó a ser su vida fuera de la cárcel, historia que también se desarrollará en la última temporada, así como su relación con Alex (Laura Prepon), quien se encuentra presa todavía.
El problema de adicción de Nicky (Natasha Lyonne) sigue; si bien nunca ha sido novedad, siempre ha sido tratado de una manera directa y puntual. La desesperación de Taystee (Danielle Brooks) tras la sentencia de cadena perpetua por asesinar a Piscatella (Brad William Henke) injustamente será otro de los temas a tocar. Sin olvidar los problemas psicológicos que tiene Pennsatucky (Taryn Manning), quien de ser una villana en la primera temporada se convirtió en uno de los personajes más emotivos. ¿Se retomará el personaje de Sophia (Laverne Cox), quien ya había salido de la cárcel? Las dudas ya se podrán disipar.
EL FINAL DE LAS HISTORIAS
En esta ocasión se le dará importancia a cerrar cada uno de los arcos de los personajes que ya conocemos, más que incluir a nuevos, ya que en las últimas dos temporadas el destino de varias colgaba de un hilo. ¿Cuál será el de Flaritza (Flaca y Maritza)? ¿Piper y Alex seguirán casadas a pesar de la salida de la primera de la cárcel? Sabemos que habrá varios reencuentros como el de Larry (Jason Biggs), el exprometido de Piper. Sin duda tendrán que sacar muchos pañuelos desechables, ya que esta temporada promete hacernos llorar más de lo normal.
Una cantidad grande de seguidores que siguen siendo fieles podrán ver en qué acaban las historias de estas mujeres. Las siete temporadas de Orange is the New Black ya se encuentran disponibles en Netflix.