Ni sus creadores o protagonistas se han pronunciado al respecto de una segunda temporada, mucho menos Neflix, quién se caracteriza de guardar con extremo secretismo cualquier plan que tengan. Lo que sí es cierto es que Antena 3 quizá se lamente que productos nacidos en su cadena sean ahora éxitos rotundos en el mundo. Cierto es que lo que ofrece el servicio de streaming no se compara con una cadena nacional de televisión, pero un producto se resume en si conecta o no con la audiencia y también es un indicador que la gente ve cada vez menos televisión convencional o canales de paga.
En Antena 3 los strippers y misterios de Toy Boy lograron por mucho estar debajo del millón de espectadores; en sus palabras: un desastre televisivo, lo cual contrasta con un triunfo en un servicio de streaming. Quizá la serie peque de telenovelera, pero seamos realistas, cuáles de los productos mencionados no lo hace.
¿Merece una segunda temporada? La verdad es que narrativamente su primera parte padece de muchas cosas, en especial de no tener mayor dinamismo en los episodios. Todo esto seguramente ya está siendo analizado por Netflix así que a esperar su respuesta para saber si continúa con esta serie o no.