El museo que aparece en la película fue construido en un estudio en Burnaby, British Columbia.
Los entrenadores pasaron varias semanas entrenando a Crystal, quién interpreta al travieso mono Dexter, para abofetear y morder a Stiller en la película.
La lengua huno fue totalmente improvisada.
El papel de Owen Wilson iba a ser sólo un cameo pero en la pruebas gustó tanto que se extendió su participación.
El Museo de Historia Natural de Nueva York tuvo 20% más visitantes después de que salió la película.