El despertar del diablo : los secretos del rodaje

Cuando la producción se detuvo por falta de recursos, varios actores tuvieron que abandonar para tomar otros proyectos. Raimi filmaría varias escenas con “stand-ins”, que fueron figuras de cartón del tamaño del actor que aparecía en la toma.

El director Sam Raimi y el protagonista Bruce Campbell, son amigos desde la universidad, donde realizaron varios cortometrajes en formato 8 mm, ayudados por Ted Raimi, hermano de Sam y la actriz Ellen Sandweiss. Los cuatro realizaron el corto llamado Within the Woods, que sería el antecedente directo a esta cinta. La diferencia sería que la heroína era Ellen y el villano poseído era Campbell.

Se filmó en el invierno de 1979, en Tennesse, donde varios miembros de la producción aseguran que fue el peor invierno de la ciudad. Equipo y cámaras se congelaron durante el rodaje.

Poco antes de finalizar el rodaje, la producción se quedaría sin dinero. Raimi, Campbell y el productor, Robert Tapert, hicieron de todo para buscar recursos, incluyendo prestamos bancarios de altos intereses, prestamos familiares y hasta Campbell pondría la casa de su familia como parte de la deuda colateral.

Casi la totalidad de la cabaña se tuvo que construir. Pero el presupuesto implicaba varios retos e improvisaciones. Uno de ellos era que la cabaña no tenía sótano, por lo que cortaron el suelo y cavaron un hoyo para montar la mitad de la escalera. Los interiores del sótano se filmaron en el garaje de Sam Raimi.

Campbell no solo actúa en la cinta, sino que fue parte fundamental de la realización. Conseguia recursos, fue camarografo, cargaba camaras y luces, colocaba los props y se lastimo el tobillo, aguantando el dolor mientras actuaba su personaje.

La noche de su estreno, en octubre de 1981, la gente interactuaba con los personajes y se quejaba de sus decisiones, además de reír en las escenas más extremas. Los inversionistas buscaron a Raimi, molestos, pidiendo un nuevo trabajo de edición, pues esperaban ver una cinta de horror no de comedia; sin embargo, durante los siguientes días, la audiencia salía de la sala fascinada, emocionada y los boletos se agotaron en todas las funciones, debido a la recomendación de boca en boca de los espectadores. No tuvo que hacerse un nuevo trabajo de edición.

En el año de estreno, la cinta fue prohibida en Alemania y en Finlandia.

Joel Coen, reconocido y alabado director y escritor, fue asistente de edición de la cinta.

Parte fundamental del éxito de la cinta fue el apoyo que mostró el escritor Stephen King sobre la misma. King, después de ver un corte enviado por Raimi, la llamo “la película de terror más original del año”, algo que ayudo a la distribución y publicidad.