El director, Jean-Luc Godard, anunció en el Festival de Cannes, en 2010, que volvería al cine con esta cinta, sobre dos personajes que, luego de varios años, no hablan el mismo idioma. También anunció que estaba interesado en filmar la historia en formato 3D.
Godard quería a los actores Vincent Cassel y Sophie Marceu para los papeles estelares. Pero cuando Cassel rechazo la oferta, el director decidió elegir actores desconocidos.
La cinta se filmó en locaciones de Lake Geneva y Rolle, en Suiza.
La cinta fue nominada a la palma de Oro, del Festival de Cannes, en 2014.
Obtuvo el premio de mejor película en los premios otorgados por la National Society of Film Critics Awards, en 2015.