Sin rodeos

En la comedia Sin rodeos, cinta dirigida por Santiago Segura (Torrente, el brazo tonto de la ley), Paz, una madrileña de 39 años, está al borde de un colapso nervioso. Tiene un trabajo bien remunerado, en una empresa de mercadotecnia, pero es constantemente humillada por el hijo del antiguo dueño, un hombre menor que ella, que no cuenta con ninguna cualificación para su puesto. En el ámbito personal, su mejor amiga está obsesionada con su exnovio, ignorándola por completo; su hermana tiene una fascinación enfermiza con los gatos y le pide que cuide de ellos mientras toma vacaciones y su novio es un holgazán que solo se interesa por cuadros que no ha logrado vender. Cuando sufre un ataque de pánico, Paz decide contactar a un gurú de televisión que le ayude a solucionar sus problemas y quien le entrega una poción especial para curarla. Pero sin planearlo, ella toma todo el frasco, provocando un efecto secundario inesperado: no tener filtro para escupir las verdades y opiniones del mundo que le rodea, generando mayores conflictos, pero, extrañamente, también una sensación de tranquilidad que había añorado.