Luce

Luce fue una víctima de la guerra civil del país de Eritrea. Huérfano, luego de ser testigo de la muerte de sus padres en un bombardeo, Luce fue adoptado por una pareja de norteamericanos blancos, Amy y Peter Edgar, quienes le dieron un hogar, una familia y un futuro. Diez años han pasado y Luce se ha convertido en un adolescente modelo, cordial, educado y cariñoso, estudiante destacado y atleta sobresaliente, en vísperas de conseguir una importante beca deportiva para asistir a las mejores universidades del país. Durante su último año, sin embargo, una de sus maestras se sorprende cuando lee un ensayo del joven, donde muestra cierta identificación y plausibilidad con un acto terrorista. Al indagar sobre las ideas de Luce, que parecen no tener un origen claro, la maestra descubre una serie de peligrosos explosivos en el casillero del joven de la escuela. Esto pone en alerta al colegio y a las autoridades, sembrando ciertas dudas sobre Luce, levantando sospechas entre compañeros y, en especial, sus padres, quienes, a pesar del cariño hacia el joven, han empezado a creer en las amenazas de los maestros.