Está ligeramente inspirada en hechos reales que sucedieron en una pequeña comunidad rural religiosa de Oklahoma.
La primera secuencia de baile estuvo formada por miembros del elenco y de la producción. Se grabaron alrededor de 150 pares de zapatos.
Los pies con zapatos dorados de la primera escena son del cantante Kenny Loggins.
Chris Penn no sabía bailar y le enseñaron usando términos de lucha.
Kevin Bacon inspiró su peinado en Sting, pues era gran fan de The Police en esa época.