En la búsqueda de mecanismos de producción, que se enfoquen en mayor producción sin importar la calidad o los peligros a la salud humana y a la naturaleza, miles de empresas han buscado recurrir a sistemas creados en laboratorio, que, por su propia naturaleza, generan consecuencias irreversibles en el ambiente. En el caso de la siembra de la soya transgénica, los pesticidas utilizados para el cultivo del mismo han causado un impacto trágico en el medio ambiente de regiones donde se practica dicho proceso. Con el documental ¿Qué les pasó a las abejas?, dirigido por Robin Canul y Adriana Otero Puerto, los cineastas exploran las consecuencias después de que el gobierno mexicano aprobó, en 2012, a la empresa Monsanto, el permiso para la siembra de soya transgénica en la península de Yucatán, provocando que varias familias y comunidades mayas de la zona presentaran juicios de amparo, aludiendo a la destrucción del medio ambiente y su propia salud, caso que todavía no se ha resuelto, caracterizado por la corrupción de las autoridades y la indiferencia de las empresas privadas en su búsqueda de beneficios propios.