Es el primer largometraje del cineasta Jorge Pareja Trigo.
Sobre la idea del documental, el director comentó: “Hacia 2017, haciendo un videoclip del grupo Capitan Mandarina, conocí a gente que luego, en 2018, me invitó a un grupo que llamaban Hakuna, que se reunía en una iglesia. Me dijeron que trajera el equipo para grabar. Yo no sabía qué sería eso. Cuando llegué, me asombró, porque vi una iglesia llena de gente muy entregada, muy feliz y muy joven. Yo pensaba que a misa ya sólo iba la gente mayor. Me asombraba cómo todos esos jóvenes alegres sentían la fe y traté de captarlo con imágenes”.