Paul Klee, un pintor suizo-alemán, huyó de Alemania en 1933 cuando él y otros artistas modernos fueron despreciados por el naciente Partido Nazi. Aislado en Suiza, una misteriosa enfermedad comenzó a causar estragos en su cuerpo, lo que lo llevo a cambiar, profundamente, su obra de arte. En el documental Angel Applicant, el director Kenneth August Meyer explora los expresivos últimos trabajos de Klee, después de que le diagnosticaran la enfermedad potencialmente mortal, una esclerodermia sistémica y, realizando una profunda curaduría del trabajo de Klee, Meyer encuentra poderosos mensajes sobre cómo hacer frente a su propia mortalidad, lo que lo lleva a utilizar imágenes coloridas y caprichosas, haciendo eco de la mística y el ingenio irónico de Klee, demostrando cómo la creatividad puede inspirarnos para superar el sufrimiento personal y aprovechar al máximo la vida.