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Una secuela que expande el terrorífico y deja varias preguntas abiertas para FNAF 3.
por Nath RodríguezEl fenómeno de las adaptaciones de videojuegos en Hollywood sigue viviendo una de sus mejores eras. Desde el enorme éxito de Super Mario Bros: La Película hasta la anticipada versión live-action de La Leyenda de Zelda, los estudios continúan apostando por franquicias que han marcado generaciones. Entre ellas, Five Nights at Freddy’s se ha consolidado como una de las más discutidas, primero por su popularidad en los videojuegos y luego por su llegada al público general gracias a la adaptación de 2023 bajo la visión de la directora Emma Tammi.
Dos años después, Tammi regresa con Five Nights at Freddy’s 2, una secuela que, más que intentar superar la primera entrega, se siente destinada a expandir este universo y preparar el terreno para una tercera parte casi inevitable. Josh Hutcherson, Elizabeth Lail, Matthew Lillard y Piper Rubio vuelven a continuar la historia apenas meses después de lo ocurrido en la primera película.
Una secuela más grande, más oscura y con mejor producción
Desde sus primeros minutos, esta película deja claro que llegó con un presupuesto más generoso. La producción vuelve a entregar escenarios escalofriantes y atmosféricos que cualquier fan de Five Nights at Freddy’s disfrutará, pero también quienes aman el terror y el suspenso en general. Los animatrónicos sorprenden una vez más: no es que antes fueran menos impresionantes, pero ahora el salto en diseño los hace lucir más imponentes y amenazantes.
La historia vuelve con Mike, quien está intentando sostener el hogar mientras cuida a su hermana Abby. Al mismo tiempo, busca ayudar a Vanessa a enfrentar el trauma de haber sido cómplice involuntaria de su padre, quien asesinaba niños. Pero hay otro problema creciendo: Abby no supera el lazo que creó con Freddy, Chica, Bonnie y Foxy, lo que le impide relacionarse con otros niños. Mike, cargando con la culpa y el miedo por los sucesos que vivieron, intenta mantenerlo todo bajo control.
Sin embargo, el caos regresa cuando se revela que el Freddy’s que Mike cuidaba era solo una franquicia y que el restaurante original sigue en pie a pocos kilómetros. Aquel que fue clausurado tras el asesinato de una niña llamada Charlotte en los años 80 a manos de William Afton. Ahí también descubrimos que los animatrónicos tenían una marioneta responsable de guiarlos durante los espectáculos del local principal. La aparición del local auténtico, el caso de la niña Charlotte y la presencia de la marioneta nos llevan a una narrativa abren una mucho más cercana al canon de los juegos.
Fan service bien integrado pero más descarado
Universal Pictures.
A diferencia de la primera película, Five Nights at Freddy’s 2 parece abrazar sin pena su origen gamer. Hay guiños por todas partes, desde la marioneta y la caja musical hasta una secuencia que recrea de forma casi directa la mecánica del juego, con Mike intentando sobrevivir usando una máscara de Freddy para engañar a los animatrónicos. Estos momentos funcionan, sí, pero también pueden sentirse más diseñados para el público fan que para los espectadores generales. Aun así, están lo suficientemente bien integrados para no romper el ritmo ni la tensión de lo que estamos viendo en pantalla.
Hutcherson pasa a segundo plano
La gran sorpresa de esta entrega es que el foco se desplaza de Mike hacia Vanessa. Elizabeth Lail ofrece una interpretación más compleja, emocional y cargada de matices: miedo, trauma, vulnerabilidad y fuerza. Su arco es el más llamativo y el que mejor profundiza en los efectos del abuso de William Afton.
Universal Pictures
Por otro lado, la llegada de nuevos personajes en mi opinión queda a deber. Mckenna Grace, esperada por muchos fans, aparece como Lisa en un rol que parece más un cameo que una participación relevante. Su potencial queda un poco irrelevante, aunque nos dan la esperanza de que pueda tener futuro en la tercera parte. Freddy Carter, como Michael Afton, celebra uno de los momentos más anticipados por los fans, pero la película no le dedica el desarrollo que muchos podrían esperar por el peso del nombre.
¿Una película puente?
Universal Pictures
La secuela tiene buenas secuencias de suspenso, humor bien balanceado y momentos visualmente muy bien logrados. Pero también es evidente que el guion está más enfocado en preparar cosas que en resolverlas. Muchas líneas narrativas quedan abiertas, gran parte del misterio se pospone y varias respuestas se sienten guardadas para Five Nights at Freddy’s 3. Esto no necesariamente es negativo, pero sí deja la sensación de que la película no es tan autosuficiente como la primera.
Al final, Five Nights at Freddy’s 2 es una secuela más ambiciosa, más cercana al videojuego y visualmente más poderosa. Funciona como expansión del universo y como experiencia fan, pero su guion depende demasiado de una futura tercera entrega para sentirse completa. Aún así, logra seguir manteniéndose atractiva y seguramente abrirá la puerta a varias teorías mientras esperamos que vuelva con una nueva entrega.
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