En el año de 1968, Esteban Guerra fue encomendado a la tarea más importante en su trabajo y que cambiaría para siempre el transcurso de su vida. Este joven ejecutivo de RTVE, recibió la orden de garantizar la victoria de España en Eurovisión, lo cual no era nada sencillo. Además Esteban no tenía una gran experiencia musical, por lo que decidió aliarse con Artur Kapps, un experto en los espectáculos y juntos decidieron buscar la canción perfecta y el intérprete o la intérprete adecuada para representar a España y proyectar los mejores valores de esta nación. Componer una canción que refleje la historia de un país, sus costumbres, valores y orgullo en definitiva no es la tarea más sencilla de todas, pero a Esteban y Artur no les quedaba otra opción y optan por hacer lo mejor. Siempre teniendo en mira su gran objetivo, estos hombres se enfrentarán a una serie de obstáculos y polémicas, pero lograrán lo imposible.