Rogelio es un ladrón, aunque con un corazón de oro, que en cierta ocasión decide esconderse en la iglesia del barrio ‘El Milagro’. Ahí, no tardan en confundirlo con un seminarista recién llegado, lo que complica aún más las cosas para este maestro del hurto. Para poner a salvo su vida, Rogelio comienza a seguir el juego a todos, utilizando una serie de refranes callejeros, la sabiduría del barrio, y algunas tácticas que le enseñó su madre para ganarse a los vecinos y que no sospechen nada. Sin embargo, varias personas comienzan a desconfiar, complicando su vida y poniendo en peligro su fachada, la confianza que construyó e inclusive su propia existencia. Sin embargo, gracias a su engaño, Rogelio también tiene la oportunidad de descubrir nuevos valores como la amistad y el apoyo mutuo, así como de centrarse en un interés amoroso que parece ser irrealizable.