Después de años de comienzos en falso, Pied Piper es ahora una presencia legítima en Silicon Valley, gracias a su compromiso de no extraer datos de los usuarios. Pero aprender a mantenerse fiel a su moral tiene un precio en este despiadado negocio. Ahora más grande que nunca, Richard sigue luchando por encontrar un equilibrio entre su integridad y las locas cantidades de dinero que tiene delante. Mientras tanto, Dinesh y Gilfoyle enfrentan las responsabilidades de ser gerentes de equipos grandes. Y, negándose a abandonar su empresa incluso cuando está siendo destruida, Gavin Belson gira en una dirección anti-tecnológica.