George Mottershead es un hombre que ha perdido el rumbo. Atormentado por los recuerdos de los combates en la Gran Guerra, ahora se encuentra viviendo con su esposa y sus dos hijas en la pequeña casa de sus padres, encima de la tienda de comestibles familiar. Un día, mientras entrega mercancías en los muelles, ve un mono ardilla no deseado y un camello a punto de ser sacrificados en la bahía de cuarentena. George no puede soportar dejarlos sufrir, así que los lleva a ambos a casa, al patio trasero de sus padres, para desconcierto de la familia. Su familia ve esto como una prueba más de que está perdiendo la cabeza, pero George está ocupado haciendo planes que cambiarán sus vidas para siempre. De camino a una reunión del ejército se topa con una ruinosa casa señorial, Oakfield, rodeada de hectáreas de terreno, y se le ocurre comprarla y construir a su alrededor el primer zoológico británico sin rejas. Contra todo pronóstico, convence al banco para que le preste el dinero para comprar Oakfield.