Después de cinco años de la muerte de Vito Rizzuto, Declan Gardiner (Kim Coates), se mantiene como el jefe de la mafia de Montreal. Hasta que una nueva raza de mafiosos llegan de Europa para comenzar una guerra en un intento de apoderarse de la ciudad. Declan se enfrenta a rivales, tanto viejos como nuevos, que quieren comenzar a comerciar con sustancias mucho más peligrosas. Mientras tanto, la organización contra el crimen organizado se prepara para derrotar a todos con la ayuda de un informante anónimo.