En esta quinta temporada, Mel se ve conflictuada con su maternidad, pues ha tenido una serie de altibajos que la han llevado a cuestionarse toda clase de cosas, entre ellas su futuro dentro de la clínica. Mientras ella lidia con ese tema, Jack también se encuentra enfrentando sus propios demonios, pues está buscando una manera de demostrarle su valía como padre a Mel. Por otro lado, la comunidad de Virgin River sufrirá un terrible incidente que les hará darse cuenta que a pesar de todo lo malo, se tienen los unos a los otros. Habrán nuevos romances, rupturas inesperadas, un juicio complicado para todos, conexiones con el pasado y toda una subida y bajada de emociones como sucesos.