En esta segunda temporada, Thony se verá inmersa en mayores problemáticas y peligros, comenzando con el terrible suceso de que Luca, su pequeño, ha sido secuestrado por su padre. Thony moverá cielo, mar y tierra para recuperar a su pequeño y como se encuentra sumamente desesperada, no le importará involucrar al FBI en su búsqueda. Thony deberá tener cuidado ya que su vida en el mundo criminal aún no ha terminado, pues se verá dividida por mantener su lealtad a Arman y a Fiona, quien podría ser deportada antes de tiempo. Aunque Thony es consciente de todo lo que ha hecho y no se arrepiente con tal de salvar a su hijo, llegará un momento en el que nuevamente se cuestione cuántas líneas está dispuesta a cruzar, pues Garrett está detrás de ella y no la piensa dejar en paz.