El 26 de septiembre de 1993, el detective John Mulligan fue asesinado con cinco disparos en la cara mientras descansaba en su patrulla en un estacionamiento de una farmacia. Cuando su cuerpo fue descubierto, su arma había desaparecido y la puerta del conductor del coche estaba abierta. Tres días después del asesinato, Celine Kirk y Tracy Brown fueron asesinados en su departamento de Boston. Su primo Sean Ellis fue interrogado por la policía, ya que mucha evidencia apuntaba su presencia en el departamento. Entre la evidencia se encontraba un paquete de pañales que provenía de la misma farmacia donde el detective John había sido asesinado. Es así como Sean fue situado en la escena del crimen. Unos días después, Terry Patterson y Sean Ellis son arrestados por cargos de asesinato a primer grado, robo a mano armada y posesión ilegal de un arma de fuego.