La historia de Mamie Till-Mobley, cuyo hijo, Emmett Till, fue brutalmente asesinado en 1955 durante la época de las leyes Jim Crow en el sur de Estados Unidos. A partir de ese momento, Mamie comenzó una lucha inalcanzable por asesugarse de que los terribles hechos no quedaran en el olvido y finalmente obtener la justicia que merecía y que tendría un impacto en el movimiento por los derechos civiles.