Máximo pretende enmendar todos sus errores del pasado con el presente que tiene por delante así que trabaja incansablemente para hacer que Las Colinas regresen a su antigua gloria, pues con toda su experiencia y conocimientos previos, espera que sea un éxito total en la reapertura. Por otro lado, el Máximo de 1986 también está haciendo todo lo posible para que Las Colinas regresen a la prestigiada primera posición en el ranking anual de Mejores Hoteles, pues su adorado hotel ha bajado de puesto y ahora su gran competidor y enemigo se jacta de ser absolutamente el mejor. Máximo está dispuesto a brindarle el mejor futuro a Las Colinas.