Un atraco a mano armada toma lugar en la línea de autobús que conecta el aeropuerto de Barcelona con Manresa, resultando en las muertes de los tres atracadores muertos, la huida de un fugitivo, y la incapacidad de seis testigos de identificarlo. Los agentes Rebeca Quirós y Fran Garza don encargados de investigar el caso u sospechan que los testigos están protegiendo al fugitivo. La situación se complica aún más cuando el caso se hace público y la opinión pública se posiciona a favor del fugitivo.