Ha pasado un año desde que Molly se divorció de la forma más pública y desastrosa de su ex marido, John Novak, pero a pesar de todo lo malo que se desató durante su divorcio, esto la ayudó a finalmente encontrar su camino por sí sola. Ahora Molly se encarga de ser una exitosa directora de la Fundación Wells, lo cual ha llevado su vida por nuevos horizontes y más ganancias. Mientras se embarca por su nuevo presente, Molly también intenta marcar una diferencia en el mundo, pero muchas veces tiende a abrir la boca más, por lo cual termina en problemas o malentendidos, así que cuando promete públicamente donar los millones de dólares que posee y ha ganado, Molly pondrá en perspectiva la antigua vida de lujos que llevaba y lo que realmente quiere, pues se enfrentará a complejas decisiones sobre usar su enorme fortuna para el bien social. Y aunque estaba decidida a renunciar a los hombres, puede que alguien se adentre nuevamente a su corazón o al menos le despierte cierta pasión.