En la década de los noventa, mientras los crímenes de odio iban cada vez más aumento y la crisis del SIDA se intensificaba poco a poco, un asesino en serie se aprovechó de la vulnerabilidad y el riesgo que corrían los hombres homosexuales de la ciudad de Nueva York. La serie documental de cuatro partes se sumerge en los prejuicios profundamente arraigados del sistema de justicia penal en la época y muestra un análisis profundo de cómo la comunidad LGBTQ+ luchó para resolver los asesinatos y exigir un trato justo a las autoridades para dar solución a los delitos a víctimas homosexuales.