Carl Morck es uno de los detectives más brillantes que existen en la policía de Edimburgo, sólo que suele tener un carácter complicado, pero tras haber estado en un tiroteo, Carl es relegado al Departamento Q. Esta unidad se encarga de aquellos casos que han quedado archivados sin resolver, por lo que Carl ahora se vuelve el líder de esta unidad y junto a sus dos compañeros deberán dar con la verdad de estos casos. Cada caso hará que este pequeño equipo se enfrente a sus propios demonios y se den cuenta de cómo su trabajo les afecta en su salud mental, sobre todo a Carl, quien deberá lidiar con varios fantasmas de su pasado. Además, cuando este departamento tenga que investigar las verdaderas razones por las que la fiscal Merritt Lingard desapareció ya que su caso había sido catalogado como suicidio, Carl y su equipo descubrirán que en realidad su desaparición esconde una red de secretos y mentiras que los llevarán a enfrentarse a gente muy peligrosa y poderosa.