Léa es una mujer de 28 años que un día despierta con ganas de convertirse en una rabina, pues siente que si se acerca a la fe podrá aclarar su mente y hallar las respuestas que tanto le han costado encontrar. Léa creció un entorno ateo debido a su padre, por lo que su decisión termina siendo una enorme sorpresa para él, y aunque no es el más feliz por esto, pronto comienza a notar grandes cambios en su hija que la hacen mejor persona. Léa está comprometida con su nuevo rol, pero cuando se da cuenta de que ella debe ser una guía para el resto y a su vez, una consejera y gran apoyo, comienza a dudar de su decisión, pues Léa siente que ni siquiera sabe quién es ella así que ¿cómo podrá ayudar a otros en sus problemáticas si ella está repleta de dudas y no conoce las respuestas? Aunque Léa intentará echarse para atrás, terminará por darse cuenta que ella también es simplemente humana sus buenos actos la guiarán al camino correcto.