Victoria Eugenia, apodada cariñosamente como Ena, se convirtió en la nueva reina de España cuando Alfonso XIII decidió contraer matrimonio con ella a pesar de las negativas de su madre. Eugenia provenía de Inglaterra, por lo que tuvo que mudarse de país abandonando a su familia, su cultura, religión y todo lo que conocía. El llegar a España fue todo un shock para ella, pues las costumbres e ideas eran muy diferentes, pero a pesar de los obstáculos y la no tan buena relación con su nueva familia, Victoria Eugenia estaba decidida a salir adelante y convertirse en la mejor reina para su gente. Ella no se dejó amedrentar por el resto y al contrario, se convirtió en todo un ícono para la liberación femenina y además se encargó de mejorar el sistema de salud para los españoles con la reconstrucción de la Cruz Roja. Ena vivió una época bastante difícil no sólo por el hecho de que todos los hombres ejercían el poder, sino por la Guerra Civil y las dos Guerras Mundiales que azotaron al mundo. Ella, con lo que tenía se encargó de cambiar el mundo.