Star Wars regresa a su esencia más divertida con esta serie que mezcla nostalgia ochentera, galaxias lejanas y un grupo de niños que accidentalmente se lanzan al espacio. Una opción perfecta para maratonear en familia.
Star Wars ha explorado casi todos los rincones posibles de su universo, pero con Skeleton Crew apuesta por un regreso emotivo a las aventuras familiares de los años 80. Creada por Jon Watts y Christopher Ford, la serie abraza sin complejos la influencia de clásicos como Los Goonies, Explorers o Lost in Space, mezclando ciencia ficción, nostalgia y humor juvenil. El lanzamiento de su primera temporada en 2024 marcó un tono ligero, divertido y lleno de misterio, diseñado para que las nuevas generaciones se enamoren de la galaxia muy, muy lejana del mismo modo que lo hicieron sus padres.
Un inicio explosivo en una galaxia en caos
Skeleton Crew arranca con un ataque pirata que deja claro el estado del universo tras la caída del Imperio. La Nueva República apenas logra mantener el orden en los sistemas más alejados, y la violencia en los bordes de la galaxia vuelve a recordar los días oscuros. Aunque esta apertura pueda sentirse familiar, funciona como una declaración de intenciones: Watts y Ford prefieren un homenaje consciente a las aventuras cinematográficas de antaño antes que la originalidad absoluta.
Tras el prólogo, la historia se traslada a un suburbio alienígena sorprendentemente pacífico y luminoso, muy distinto a los mundos polvorientos y decadentes habituales en Star Wars. Allí conocemos a Wim, un niño distraído y soñador que imagina hazañas de Jedi mientras su padre trabaja sin descanso. Junto a él aparecen Neel, su tierno mejor amigo de piel azul, y las rebeldes Fern y KB, dos compañeras que inspiran el deseo de aventura que pronto cambiará sus vidas.
El relato se acelera cuando Wim, al tomar una peligrosa ruta para llegar a la escuela, descubre una nave enterrada en el bosque. En un descuido, los cuatro niños activan accidentalmente el vehículo y terminan lanzados al espacio profundo junto al androide SM-33. Esta premisa enlaza directamente con las historias juveniles de los 80; un grupo de amigos inexpertos enfrentándose a un viaje imposible que nunca buscaron, pero que los transformará para siempre.
Los personajes de ‘Skeleton Crew’ que evocan la magia del cine ochentero
La química entre los jóvenes protagonistas es uno de los mayores aciertos de Skeleton Crew. Cada uno encaja en un arquetipo reconocible: el soñador impulsivo, la líder intrépida, la mente analítica y el amigo temeroso pero leal. La serie aprovecha esa dinámica para construir una aventura fresca que funciona tanto como homenaje como propuesta original dentro del universo Star Wars.
El elemento más enigmático llega con Jod Na Nawood, el personaje de Jude Law. Aunque su papel en principio se mantiene en secreto, la serie deja claro que tiene una conexión con la Fuerza. La ambigüedad alrededor de sus habilidades y su verdadera identidad alimenta una de las tramas centrales de la temporada, especialmente porque los niños están dispuestos a creer cualquier cosa que les suene heroica.
Entre referencias ochenteras, humor ligero y una creciente sensación de peligro, Skeleton Crew se perfila como una serie ideal para ver en familia. Es un recordatorio de que Star Wars siempre ha sido, en el fondo, una historia sobre niños y niñas enfrentándose a lo desconocido con valentía, torpeza y mucho corazón. Si mantiene el ritmo, podría convertirse en uno de los proyectos más encantadores de la franquicia en la era Disney+.