Hay películas que te dejan helado y no precisamente porque sale un monstruo cada cinco minutos o porque haya litros de sangre por todas partes, sino porque tiene algo en su historia que se te queda en la mente como un pensamiento obsesivo. Desde clásicos del terror como El exorcista o El resplandor, que te hacen dormir con la luz prendida, o Se7en, donde muestra el lado más cruel de los humanos, hasta Psicópata americano, que su título lo dice todo, estas películas te perturban de muchas maneras.
Pero cualquiera que esté buscando una película que realmente los deje con la piel chinita, pero sin invertir mucho de su tiempo, en Netflix México hay una recomendación ideal. Desde el primer minuto, esta historia comienza de forma inquietante, y lo mejor de todo, es que podrás verla en menos de dos horas, justo lo necesario para terminarla y recuperarte del trauma antes de irte a la cama a dormir.
La película en cuestión es 1922, y es una adaptación de una historia escalofriante escrita por Stephen King, el mismísimo maestro absoluto del terror y de lo inquietante, quien también es la mente detrás de El resplandor y Eso. La cinta está disponible en Netflix México, lista para sumergirte en su ambiente lúgubre y silencioso, donde las decisiones pesan y los secretos se pudren (pero sólo asegúrate de no verla justo antes de dormir).
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La historia se cuenta desde la perspectiva de Wilfred James, un hombre poco fiable que admite haber asesinado a su esposa, Arlette, junto con su hijo en Nebraska, para evitar que ella venda sus tierras y se lo lleve a vivir a la ciudad. Pero lo más fuerte no es el crimen en sí, sino todo lo que pasa después. Porque Wilfred no sólo tiene que cargar con su culpa, sino que su vida empieza a desmoronarse de formas que parecen castigo divino.
Tras enterrar su cuerpo, se ve aterrorizado por ratas y, a medida que su vida se desmorona, se convence de que su esposa lo persigue. El protagonista de esta pesadilla rural es Thomas Jane, actor que probablemente recuerdes por The Punisher o La niebla. Aquí hace uno de los mejores papeles de su carrera, con una transformación física y emocional que te deja sin aire.
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En 1922, lo más perturbador no viene en forma de espíritus, sino que el verdadero horror está en las decisiones humanas. Es un ejemplo de cómo una mala elección puede cambiar toda una vida. 1922 no sólo es una película de crimen, sino también de culpa, remordimiento y castigo, muy al estilo de Stephen King.
