Las películas más taquilleras no siempre provienenen de Hollywood. Aunque muchos siguen esperando pegados a los estrenos del MCU, como Los Cuatro Fantásticos, o a ver si otras franquicias como Rápidos y furiosos sacan una entrega, hay otras partes del mundo haciendo cosas igual de impresionantes, o incluso más intensas, de las que muchas veces nadie se entera.
Pero en estos últimos años, el cine asiático ha demostrado que no sólo es bueno, sino que puede romper récords. Todos vimos lo que pasó con Parásitos, Tren a Busan y más recientemente Godzilla Minus One, que dejó a medio planeta sin aliento. Pero si creías que ya lo habías visto todo, te tenemos una sorpresa: hay una película china que recaudó más de 460 millones de dólares, fue un fenómeno en su país, y aún así pasó medio desapercibida en este lado del mundo.
Si ya estás cansado de ver lo mismo en tu catálogo de streaming y quieres algo épico, emocionante y visualmente alucinante, tienes que conocer Los 800, una producción de 2020 que no solo arrasó en taquilla, sino que se convirtió en todo un símbolo del cine bélico en Asia. Dirigida por Guan Hu, Los 800 es una película basada en hechos reales, de esos que no te contaron en la escuela, pero que deberían de ser enseñados.
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La historia se sitúa en 1937, en plena guerra entre China y Japón, y nos lleva directamente a la defensa del almacén Sihang en Shanghái. Allí, un grupo de soldados chinos, alrededor de 400, aunque fueron "convertidos" en 800 para fines estratégicos, resiste el avance del ejército japonés mientras todo el mundo observa desde el otro lado del río.
Lo impactante no es sólo el conflicto, sino la forma en que está filmada. Guan Hu y su equipo utilizaron cámaras IMAX para capturar cada disparo, cada explosión, y cada mirada de desesperación como si estuviéramos ahí. Los 800 es cine bélico de alta gama, con una producción que no le pide nada a lo mejor de Hollywood.
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Por si fuera poco, Los 800 fue un verdadero acontecimiento. No sólo fue la película más taquillera de 2020 a nivel mundial, superando a todas, sino que también se convirtió en un símbolo de patriotismo, resistencia y orgullo nacional para los chinos. Y aunque podría pensarse que es una cinta de propaganda, lo cierto es que logra equilibrar muy bien la acción con el drama humano