Hay nombres que, incluso después de partir, siguen haciendo ruido. Tal es el caso de Akira Toriyama, el genio detrás de Dragon Ball, quien lamentablemente falleció en marzo de 2024, pero su legado sigue más vivo que nunca. Y es que con más de 40 años de historia, Goku y sus amigos siguen dándonos motivos para gritar "¡Kamehameha!" frente a la pantalla. Ya sea con nuevos capítulos, películas o la muy esperada Dragon Ball Daima, los fans están lejos de dejar esta historia atrás.
A lo largo del tiempo, Toriyama no sólo creó algunos de los combates más épicos del anime, sino que también escondió pistas, sembró teorías por todos lados y dejó entrever secretos que ahora, con su partida, han cobrado más sentido. Uno de ellos tiene que ver con un personaje que siempre estuvo en segundo plano, pero que según el mismísimo mangaka, podría ser tan poderoso como Goku si tan solo lo intentara de verdad.
No estamos hablando de Vegeta, ni de Broly y ni siquiera de Gohan. Nos referimos a Piccolo, el guerrero verde, al estratega callado y al eterno sensei. El namekiano favorito de muchos recibió un boost impresionante en Dragon Ball Super: Super Hero, donde dejó claro que nunca ha estado tan lejos del nivel de los Saiyajin. Lo más curioso de todo es que Toriyama confesó que Piccolo siempre había tenido ese potencial, sólo que su estilo reservado y su naturaleza lo han mantenido alejado del protagonismo.
Toei Animation
Pero por fin, después de mucho tiempo, llegó el momento para que el viejo mentor se luciera como nunca. En la película, Piccolo solicita ayuda a Shenlong para liberar su poder oculto y el resultado es yba transformación bestial que lo convierte en Piccolo Naranja, con músculos de acero, una energía desbordante y una presencia que impone respeto.
Pero lo que muchos no saben es que esta nueva forma lo puso hombro a hombro con los pesos más pesados del universo Dragon Ball, incluidos Goku, Vegeta y hasta Gohan. Esto lo explicó Toriyama antes de morir, quien dijo que esta transformación le permitió enfrentarse a amenazas que antes lo habrían superado por completo.
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Lo cierto es que, durante décadas, Piccolo siempre fue el tipo que ponía orden en el caos, el maestro sabio, el tipo que salvaba a Gohan en el último segundo. Sin embargo, en términos de fuerza bruta se quedaba. Pero Toriyama le hizo justicia haciendo que fuese el namekiano quien liderara el ataque, mostrando que no necesita de una cola ni de ser Super Saiyajin para estar a la altura de los mejores.
