Si creciste en los años noventa probablemente eres de los que estuvieron muy pendiente a las series animadas de Cartoon Network y Nickelodeon como Rugrats: aventuras en pañales, Johnny Bravo o El laboratorio de Dexter. Y por muchas buenas anécdotas que tengas con estos programas también hay una serie que se coló entre tu programación y que por su tono más adulto tal vez no debiste haber visto, pero por tratarse de dos protagonistas animados; un perro y un gato; tus papás jamás sospecharon de ella.
La trama sigue a un chihuahua neurótico y un gato bobalicón que viajan por el mundo viviendo extrañas y únicas aventuras que de un momento a otro se convierten en situaciones absurdas y bastante irreverentes. Aunque parecían ser una divertida dupla disfuncional como Tom y Jerry, en realidad su comportamiento era mucho más extremo.
Se trata de el Show de Ren & Stimpy que corrió con cinco temporadas y un total de 52 episodios desde que estrenó en diciembre de 1990 y hasta finales de octubre de 1996. Si alcanzaste a ver algunos capítulos de su caótica compañía seguramente recuerdas alguna disparatada historia suya o se quedó por lo menos una imagen de su animación grotesca.
Creada por John Kricfalusi, la serie estaba llena de sátira y humor negro tan surreal que ponía a sus protagonistas a vender pezones de goma, por ejemplo, y mostraba los brotes de psicosis violentos de Ren tanto como exageraba la estupidez de Stimpy a niveles ridículos.
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Su animación incluía también varias secuencias de violencia e imágenes sumamente detalladas de momentos desagradables como aquel episodio en que Ren se niega a lavarse los dientes y muestra una sonrisa excesivamente deteriorada. El humor, por supuesto que tampoco estaba dirigido a los menores de edad y aunque no era tan extremo como en South Park, sí había insinuaciones sexuales, abuso de sustancias y trato de temas oscuros en distintas ocasiones.
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De hecho, como El Show de Ren & Stimpy estrenó en un canal dirigido a público infantil, el creador de la serie tuvo algunos problemas con la cadena y varios episodios fueron censurados por "exceso de contenido inapropiado". De cualquier forma, seguro que muchos de nosotros alcanzamos a ver varios capítulos de esta serie animada para adultos que se coló entre la programación infantil y la memoria de una amplia audiencia.