En el cine hay películas que simplemente se niegan a envejecer. Aunque pasen los años, el público sigue disfrutando ciertas historias con la misma emoción, como si fuera la primera vez que la ven. Títulos como Star Wars, Jurassic Park (que ha evolucionado hasta Jurassic World: Renace) o las aventuras interminables de Harrison Ford como Indiana Jones, siguen atrapando con su mezcla perfecta de acción, personajes memorables y tramas que no pierden la magia. Estas y otras cintas son esas que, cuando aparecen en la televisión o en alguna plataforma, no hay manera de no quedarse viéndolas, aunque ya sepamos qué va a pasar.
Entre ese grupo selecto de clásicos eternos, hay una película que cumple 32 años desde su estreno, y que a pesar del paso del tiempo sigue siendo una aventura épica, cargada de emoción, humor y momentos que te hacen querer tomar un arco y lanzarte al bosque más cercano. Lo mejor de todo es que no necesitas viajar al pasado para revivirla, porque está disponible tanto en HBO Max como en Amazon Prime Video, con una doble oportunidad para disfrutarla cuando tú quieras.
Se trata de Robin Hood: Príncipe de los ladrones, protagonizada por Kevin Costner en uno de los papeles más icónicos de su carrera. Esta versión de los noventa del famoso forajido que robaba a los ricos para ayudar a los pobres, con su estilo rebelde, su carisma a prueba de flechas y una banda sonora épica, aún hoy tiene el poder de poner la piel chinita a cualquiera que la vea.
Almost Ginger
La historia que todos conocen gira en torno a Robin de Locksley (Costner), un noble inglés que regresa a Inglaterra tras ser prisionero en las Cruzadas, sólo para descubrir que el lugar en el que creció ha cambiado drásticamente: su tierra fue tomada, su padre asesinado, y el pueblo vive bajo el yugo del malvado Sheriff de Nottingham, interpretado por el gran Alan Rickman. Ahora, Robin tiene que enfrentarse a todo lo que está hundiendo poco a poco en la miseria a los habitante del pueblo.
Pero Robin no está solo. Con la ayuda de su leal amigo Azeem (interpretado por Morgan Freeman), junto a un grupo de marginados que viven escondidos en el bosque de Sherwood, Hood se convierte en un símbolo de resistencia y se enfrenta al poder corrupto de la nobleza. Y por supuesto, no puede faltar el romance con Lady Marian, lo que le da el toque especial que nunca puede faltar en toda buena historia.
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Además, si creciste en los años 90, seguro recordarás el exitazo de la canción "Everything I Do (I Do It for You)", que sonaba en todos lados gracias a Bryan Adams. Pero lo más impresionante es que, aunque han pasado más de tres décadas desde su estreno en 1991, Robin Hood: Príncipe de los ladrones sigue siendo igual de entretenida. No importa si ya la viste diez veces o si es tu primer encuentro con esta historia: la película mantiene su magia intacta y eso no lo logran muchas.
