A todos les encantas las historias de estafas bien contadas. Hollywood tiene una larga lista de títulos donde los embaucadores son los reyes de la pantalla: Estafadoras de Wall Street nos mostró cómo un grupo de bailarinas pudo sacudir al mundo financiero, Ocean's 8: las estafadoras nos trajo a un equipo de ladronas con estilo y astucia, y Baby: el aprendiz del crimen hizo que nos cuestionáramos si tener ritmo al volante es la clave para un atraco. Por supuesto, no podemos olvidar esas series que nos hicieron amar a los timadores profesionales comoLa casa de papel e Inventando a Anna.
Pero, algo curioso y poderoso ocurre cuando la estafa no es parte de un guión de ficción, sino que sucedió en la vida real. Y la cosa de pone aún más interesante cuando la mente maestra que orquesta el crimen no es un personaje de película, sino un actor con sueños de fama que terminó protagonizando un drama judicial de proporciones millonarias. Todo esto sí pasó y su historia supera cualquier giro de los guines de Shonda Rhimes.
En medio de la fiebre por contar historias reales que parecen sacadas de un thriller, se viene una producción que promete dejarnos con la boca abierta. Esta es la historia de un joven galán de Los Ángeles, con aspiraciones a conquistar Hollywood, carisma y una sonrisa encantadora. Todo parecía indicar que estaba a punto de convertirse en la próxima gran estrella, pero en lugar de eso, terminó tras las rejas, acusado de haber armado una estafa piramidal de más de 690 millones de dólares.
Deadline
Todo esto es la premisa de Hollywood Ending, un documental explosivo que pondrá bajo la lupa la historia de Zachary Horwitz, también conocido como Zach Avery. La producción se adentrará en los detalles del ascenso y caída de este aspirante a actor que, al ver que los castings no le estaban dando para pagar la renta de Beverly Hills, decidió que era buena idea prometerle a inversionistas que tenía jugosos acuerdos con Netflix y HBO, cosa que era completamente falsa.
Zach vendió la ilusión de estar distribuyendo películas a gigantes del streaming, cuando en realidad no tenía ni un pie dentro de esos estudios. Y como buen personaje de película, fue tan convincente que muchos inversores cayeron redonditos. El resultado fueron cientos de millones desaparecidos y un imperio ficticio que se desmoronó rápidamente. Y lo más surrealista de todo es que Horwitz sí actuó, pero no en las cintas que decía estar distribuyendo.
Netflix
Hollywood Ending no se enfocará sólo en los delitos, sino también en cómo un tipo aparentemente común logró embaucar a personas con millones en el banco. El documental mostrará correos falsos, contratos inventados y promesas vacías, todo envuelto en una fachada cuidadosamente construida. Y como en todo buen documental, también habrán testimonios de quienes confiaron en él y terminaron perdiéndolo todo.