En 2009, Lars von Trier estrenó Anticristo, un filme oscuro y perturbador que abrió lo que más tarde sería conocido como su “Trilogía de la depresión”, completada con Melancolía y Ninfomanía. La historia, protagonizada por Charlotte Gainsbourg y Willem Dafoe, muestra a una pareja que enfrenta la pérdida de su hijo y que, en un intento de sanación, se interna en una cabaña en el bosque. Allí, el dolor y la desesperación se transforman en violencia, sexo y tortura, en una de las propuestas más extremas del cine contemporáneo.
Una historia de duelo, dolor y sexualidad que llevó a Willem Dafoe y Charlotte Gainsbourg al límite en pantalla
Debido a que la película gira en torno a la intimidad y la sexualidad de sus protagonistas, von Trier incluyó escenas de desnudez y de sexo explícito. El propio arranque de Anticristo muestra una secuencia en cámara lenta y en blanco y negro de una penetración, aunque los actores principales no participaron de manera directa en esas tomas. Para ello se recurrió a dobles de cuerpo, tanto para Gainsbourg como para Dafoe.
En el caso de Dafoe, la decisión de usar un doble generó un revuelo particular. El motivo no tuvo que ver con pudor ni con limitaciones técnicas, sino con una cuestión muy peculiar: el tamaño del pene del actor, que según el propio von Trier resultaba tan desproporcionado que se convertía en una distracción para la narrativa. El director de Dogville y La casa de Jack lo explicó con crudeza en una entrevista, asegurando que el pene del actor era “tan grande que confundía a todos los presentes en el rodaje”.
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El propio Dafoe, en entrevistas concedidas a Dazed Digital en 2009, confirmó la decisión con naturalidad. Reconoció que, de haber utilizado su cuerpo real, la conversación alrededor de la película se habría centrado en el morbo y no en el trasfondo psicológico y emocional que el director quería transmitir. “Si hubiera sido yo, de eso es de lo único que se habría hablado”, comentó el actor, dejando claro que prefería que la atención se concentrara en la historia.
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‘Anticristo’: la polémica escena íntima que obligó a Willem Dafoe a ser reemplazado
Más allá del escándalo, Dafoe es reconocido como uno de los grandes intérpretes de su generación. Su carrera abarca colaboraciones memorables con directores como Abel Ferrara y Martin Scorsese, donde ha encarnado personajes complejos, intensos y profundamente humanos. Sin embargo, la conversación en torno a Anticristo y el uso de un doble de cuerpo alimentó aún más la leyenda que rodea su figura.
Incluso en proyectos anteriores, como La última tentación de Cristo, el actor vivió situaciones incómodas con escenas de desnudo. Dafoe contó que, durante la crucifixión filmada por Scorsese, debieron intervenir miembros del equipo para cubrir sus genitales en pleno rodaje, una anécdota que él mismo recuerda con humor.