La nueva temporada de la serie antológica creada por Ryan Murphy llegó a Netflix con Monstruo: la historia de Ed Gein y desde su estreno el pasado 3 de octubre ha sido la serie más vista en Netflix México.
Los usuarios que ya la han visto pueden ser testigos de que dentro de la serie existen escenas bastante fuertes, incómodas o difíciles de ver. Lo cual representa que al momento de grabarlas al igual fue un reto, pero Charlie Hunnam en el protagónico demostró su compromiso y calidad actoral.
El reto de interpretar a un asesino
La serie inspirada en el asesino Ed Gein, quien fue acusado de dos asesinatos y de realizar objetos con las pieles y huesos de cadáveres, dejó sobre la mesa un personaje nada fácil de interpretar, pero Hunnam tomó este reto en su carrera con el mayor compromiso y respeto posible.
Parte de la naturaleza del personaje es tener escenas sobre todo muy gráficas o explícitas, lo que nos genera la duda de cómo fue vivir esto durante el rodaje. Una de las tantas escenas impactantes de la serie, existe una que sorprendió a los espectadores. Que por su puesto esto puede ser un spoiler para muchos.
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Todo el equipo quedó sorprendido con Charlie Hunnam
Hay un momento en el que Ed Gein deposita el cadáver de una mujer con la que va a tener relaciones sexuales, y se toma el tiempo de dar una serenata con un acordeón para tratar de seducirla. Una escena bastante inquietante que incluso el creador Ryan Murphy supuso que sería muy complicada para Charlie Hunnam.
Según el medio GQ, al igual el guionista se tomó el tiempo de hablar con Hunnam sobre buscar opciones alternativas, por si acaso, pero no contaba con el compromiso fiel del actor hacia su personaje, quien simplemente respondió: "No, es pan comido".
Un nivel de dedicación y profesionalismo, que también dejó sorprendido en el set al cocreador del programa, Ian Brennan:
Miré [a Charlie] y era él. Era Ed Gein. Me dejó sin aliento.
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La actuación de Charlie ha sido bastante elogiada y el actor está muy consciente de que es un personaje que resulta imponente y muy fuerte de interpretar a un grado tan íntimo. A pesar de esto el Hunnam tuvo que desarrollar cierto nivel de empatía con el asesino y su historia de vida para encarnarlo de la mejor manera posible:
"Mi papel no es juzgarme a mí mismo en absoluto. [...] Es muy probable que me critiquen fuertemente por mostrar demasiada empatía hacia él, y solo tuve que seguir mis instintos".