La ciencia ficción en televisión ya no es lo que era antes. Pasamos de efectos rudimentarios a producciones que parecen imposibles de distinguir de la realidad. The Expanse, Westworld y El problema de los 3 cuerpos demostraron que el género puede ser profundo, visualmente impresionante y narrativamente ambicioso, todo sin perder ese toque humano que nos hace obsesionarnos episodio tras episodio.
La competencia es dura y cada año aparecen nuevas apuestas que intentan subir la vara aún más alta. Sin embargo, hay una serie que ha logrado sobresalir por encima de todas, no solo por su historia, sino por cómo la cuenta: con efectos que parecen cine, mundos vivos y una narrativa tan grande que cuesta creer que quepa en una pantalla chica.
Una historia que se expande tanto como el universo
Nos referimos a Fundación, la épica espacial inspirada en las legendarias novelas de Isaac Asimov. La serie nos lleva a un futuro lejano donde el Imperio Galáctico gobierna millones de planetas, aunque su estabilidad cuelga de un hilo. Hari Seldon, un genio matemático, desarrolla una teoría capaz de predecir el comportamiento colectivo de la humanidad a gran escala: la "psicohistoria". Y sus cálculos no mienten: el Imperio está destinado a caer, seguido por miles de años de caos.
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La solución es tan ambiciosa como desesperada: crear una "Fundación", un grupo de exiliados científicos que viajarán a los confines del universo para preservar el conocimiento humano y acortar la oscuridad que se aproxima. Lo que sigue es un viaje monumental donde política, traición, fe, ciencia y destino chocan sin descanso.
Efectos visuales que harían soñar a cualquier director de Hollywood
Una de las razones por las que Fundación ha causado tanto revuelo es su producción visual, que rivaliza con franquicias cinematográficas como Star Wars o Duna. Las ciudades futuristas parecen maquetas vivientes y las naves espaciales se desplazan con un realismo que te hace creer que alguien filmó esto realmente.
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Pero impresionante de spoiler: Fundación no es solo su escala, sino cómo aterriza todo en personajes profundamente humanos. Desde Gaal Dornick, hasta los Emperadores Géneticos, cada figura aporta un dilema moral, emocional o político que te mantiene pegado a la pantalla.
Si lo tuyo es la acción espacial pura, Fundación te sorprenderá con sus escenas impecables. Si prefieres historias filosóficas, aquí encontrarás reflexiones sobre el poder, el destino y la fragilidad humana. Y si simplemente quieres dejarte llevar por imágenes espectaculares, es probable que pauses más de una escena de Fundación solo para admirarla.
