Con una filmografía de más de 100 películas, un premio Oscar y un carisma excepcional Robin Williams se convirtió en uno de los actores más queridos y versátiles de Hollywood. Es recordado por proyectos familiares como Hook, Papá por siempre o Jumanji, pero también movió las emociones de la audiencia con cintas al estilo de La sociedad de los poetas muertos y Mente indomable.
Con ese movimiento de un género y proyecto a otro Williams demostró que podía ofrecer interpretaciones divertidas tanto como complejas y ligeramente más oscuras; contando el suspenso de Retratos de una obsesión, por ejemplo. Sin embargo, su rango actoral tenía un tope, no por su talento sino por decisión propia.
"Simplemente no podría"
El actor de Insomnia dio un paseo por su amplia carrera en una entrevista con US Weekly agradeciendo la amplia oportunidad que tuvo de saltar de un tipo de papel a otro, pero también reflexionó sobre aquel rol que jamás quiso interpretar.
"Siempre me ofrecieron una gama bastante diversa de papeles", explicó el actor. "Me gusta hacer películas infantiles, pero también dramas serios y comedias disparatadas. Es bueno ser considerado para más de un tipo de personaje", comentó Williams.
Prime Video
Relató que en ese sentido la película Sufridos ciudadanos fue la experiencia que le permitió saber qué tipo de roles definitivamente no le gustaban:
También decidí conscientemente no hacer cosas que simplemente no podría. La única película en la que usé un arma automática fue 'The Survivors' y era una comedia. Creo que nunca podría volarle la cabeza a alguien de un disparo
La cinta que le abrió una puerta muy especial
Al mismo tiempo, el actor recordó que La sociedad de los poetas muertos fue un proyecto esencial en su vida porque sirvió para abrirle la puerta al tipo de personajes que intentan conectarse conscientemente con las personas.
Netflix
Piensa en títulos como Good Will Hunting o Patch Adams en donde Williams brilla por la forma en que cuida de la gente a su alrededor y conecta no sólo con los personajes de cada cinta sino el público que las vio. Robin Williams falleció hace 11 años, pero su legado sigue presente en su filmografía en la que siempre habrá una película para cada ocasión.