El final de Stranger Things pone fin a una de las historias más famosas y asombrosas en cuestiones de entretenimiento, y que contribuyó a la gigantesca migración hacia contenidos en streaming. Sin embargo, no se presenta oficialmente como una temporada más, sino como un episodio con identidad propia -o un tomo catalogado como Stranger Things 5-, en una decisión que además de haber llamado la atención de los seguidores más atentos de la serie, nos muestra una forma de narrativa distinta, que juega con los tiempos de duración y cantidad de episodios en las series de Netflix.
Aunque en términos formales Stranger Things sí se divide en temporadas -cada una compuesta por entre ocho y nueve episodios, estrenada con uno o más años de diferenci, siguiendo el modelo habitual de las series de streaming-, esa estructura no se refleja plenamente en la forma en que los distintos bloques de episodios son titulados de manera oficial.
'Stranger Things': Una seria con cada temporada pensada como una historia con una temática particular
Netflix
Y es que desde su segunda entrega, Netflix numeró cada parte directamente como Stranger Things 2, Stranger Things 3 y Stranger Things 4, en una lógica que se mantiene ahora con Stranger Things 5.
Además dicha denominación aparece tanto en el catálogo de la plataforma como en los créditos iniciales, donde el número se añade siempre después del título principal, pero aunque en otros apartados del servicio se conserve la referencia a "temporada" por coherencia con el resto de las series, aquí es distinto.
La razón detrás de esta elección fue explicada por Matt Duffer -cocreador de la serie junto a su hermano Ross-,quien en declaraciones a The Hollywood Reporter señaló que como ambos crecieron viendo principalmente cine y no televisión, esto influyó directamente en la forma de concebir la serie.
Un concepto que tuvo éxito en la forma de narrar la historia
Netflix
Por otra parte, los creadores señalaron su deseo de cumplir con el objetivo de que cada entrega tuviera una identidad propia, casi como si se tratara de una película independiente dentro de una saga.
Dicha estrategia también respondió a una preocupación creativa al evitar la repetición y el desgaste narrativo de la serie. Para los Duffer, el momento en que se sintieran aburridos sería la señal de que la serie debía terminar, antes de que su calidad se viera afectada.
Así que el paso del tiempo, Stranger Things logró un enfoque único adoptar una historia cada vez más cercana a una superproducción cinematográfica, tanto en duración como en ambición visual, presentando en lugar de una simple temporada final, el último gran capítulo de una historia concebida como una saga cinematográfica dividida en partes numeradas para ser distribuida en formato de T.V.