Phil Lord y Chris Miller eran los directores designados para darle rumbo a la película, pero a pocas semanas de terminado el rodaje fueron despedidos por Lucasfilm por diferencias creativas. Una fuente anónima pero cercana a la producción ha declarado que el tono que ambos querían darle a Han Solo: Una historia de Star Wars era muy parecido a las cintas de Guardianes de la galaxia, situación que le pareció muy riesgosa a la directiva de la compañía propiedad de Disney.
Parecía todo perdido para el proyecto, pero de repente Ron Howard aceptó el reto de concluir la cinta con todo y consejos de George Lucas. Le fueron suficientes tres días para reanudar el rodaje y filmar muchas escenas nuevamente. De hecho. se afirma que el 70% de la película es parte de su trabajo y no de Miller y Lord, quienes se suponía ya tenían prácticamente terminada la producción.